Sueños de un huevon

Nerón 

Sabían ustedes que el emperador Nerón, aquel que incendio Roma, para luego echarle la culpa a los cristianos, aduciendo que fueron ellos. Para que los persigan, encierren y maten luego, logró su cometido, ya que ellos fueron capturados y torturados. Pues este emperadorsito, le gustaba bañarse en semen, si, así como lo leen. Le encantaba eso. Reunía a los hombres quienes le hacían ese favor, él en su bañera, en medio de todos ellos, gozaba mientras recorría todo ese liquido por su cuerpo, cual jabón. Al costado una bella doncella, tocaba su citara. Y ahora dirán por que cuento esto. Es que hace unos días hice una sesión de hipnosis, llamada hipnoterapía regresión, y en ella pude viajar en el tiempo y me sorprendí al saber que yo era uno de aquellos soldados que le hacía esos favores a neronsito. A mi como si la hueva, pero este csm, se bañaba a diario, pero algunas veces lo hacía a tal hora, y luego pasado un ratito, con el cuento del calor, nos mandaba a llamar, por que quería bañarse otra vez. ¡Puta madre! exclamábamos todos. Hasta que me achore, ta huevon a cada rato, que pensaba que no cansa, no ta' loco, que busque a otros huevones. Esa osadía me costo que ese csm del emperador, me mandase al coliseo como gladiador. Le saque la chucha a todos, y nerón de picon, me mando a los leones.. A esos también les saque la mierda, y le dije en su pepa a nerón, ya pe causa, si al menos me enviases unos toritos, luego de matarlos, me los hacía en bisteck, y luego aprovechaba todo, para hacerme un cau-cau, una chanfaina. Nerón muy furioso no tuvo otra cosa que dejarme en libertad, a parte más aún que yo fui testigo de como incendiaba la ciudad. Y tuvo miedo que lo delatara.

 Ya luego me dí cuenta que me había quedado jato en la consulta del hipnotista.